La red de apoyo a mamá, clave para una lactancia exitosa
Por: Ana María Hanssen
Recuerdo que en los primeros días de ser mamá, sentía que iba a desfallecer de cansancio sentada en una mecedora dando pecho a mi bebita. Paradójicamente pensaba que no estaba haciendo “nada” cuando en realidad estaba haciendo “todo”. Pero la mente en este mundo que no para nos engaña con pensamientos que nos exigen ser más a pesar de que ya lo somos: acabamos de parir a un bebé y nuestra única responsabilidad y actividad debería ser esa, estar con el bebé para alimentarlo y nutrirlo física y emocionalmente.
Por fortuna yo conté con el apoyo de mi mamá que aunque no vive en el mismo país que yo, pudo venir a estar conmigo durante los primeros meses en los que la vida laboral de mi marido no tuvo pausa. Sin ella, esas horas de “cansancio” se habría convertido en estresantes con todo lo que implica que una casa siga funcionando y que uno como nueva mamá, también tiene necesidades individuales.
Yo podía estar sentada en la mecedora, pero ella me charlaba, me preparaba comida, me sugería que después podríamos salir a tomar aire o ella se llevaba un rato a mi bebé. También conté con el apoyo de mis hermanas, de amigas que venían a traerme comida o a saludarme, de mi marido, que estaba de acuerdo con mi lactancia exclusiva aunque a veces me viera exhausta y me ofrecía darle de mi leche en biberón a mi bebita para que yo pudiera dormir cuatro horas seguidas.
Cuando mi mamá tuvo que volver a su casa, yo ya estaba más confiada y con la práctica logré que mi lactancia fluyera. Y pensé que durante los primeros días y al encontrarme con los primeros obstáculos amamantando, quizás no habría sido fácil superarlos si no tuviera el apoyo de mis seres queridos.
Sé que muchas mamás no cuentan con ese apoyo y que esa es la razón por la cual algunas dejan de amamantar antes de lo que quisieran. Por eso pienso que es fundamental el apoyo que también pueden encontrar afuera de su círculo de afectos más cercanos. Por ejemplo: grupos de mamás lactantes (reales o virtuales) en las que cada quien puede compartir sus inquietudes y preguntas -sin ser juzgadas-, y consultoras de lactancia.
Sé que hay muchas mamás como yo que viven lejos de su familia, de su país y que estos apoyos externos son indispensables también a la hora de tener éxito con la lactancia materna.
Para mí amamantar va más allá de ser un hecho biológico o natural. Es algo que implica una decisión basada en la información, aprendizaje, relación emocional cercana con el bebé, compromiso, tiempo y apoyo.
Dar pecho trasciende al círculo familiar y a la experiencia que hayan tenido las mujeres de nuestra familia. La lactancia es un derecho humano que se debe apoyar y que tiene repercusiones no sólo a nivel personal, sino en la salud pública y hasta en las decisiones políticas.
Como leí alguna vez estudiando sobre este tema: “no amamanta una mujer, amamanta toda la sociedad”.
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